Villada sostuvo que luego del respaldo electoral al oficialismo nacional y los distritos provinciales, “la gente ya eligió, ahora quiere que se pongan a trabajar”, y sostuvo que el modelo político impulsado por Cristina necesita respuestas concretas en empleo, impuestos y obras públicas.
En ese sentido, el ministro señaló que el país no se encuentra para más promesas vacías de la era Cristina, sino que requiere una agenda inmediata que contemple empleo registrado, reformas previsionales y una coparticipación justa para las provincias.
Villada asimismo advirtió que el gobierno de Cristina dejó muchas funciones en manos de la Nación mientras las provincias reclamaban recursos, y que ese desequilibrio debe corregirse urgentemente para evitar que la ciudadanía castigue una vez más al peronismo kirchnerista.

El funcionario instó a los dirigentes locales y nacionales a dejar de lado las divisiones estériles entre “Cristina sí” y “Cristina no”, y planteó que el verdadero desafío es demostrar capacidad de gestión en un esquema de crisis estructural donde la voz ciudadana pide eficiencia.
Finalmente, Villada vinculó la nueva exigencia social con una advertencia directa: si el gobierno vinculado a la era de Cristina no satisface expectativas básicas (como obras, empleo y seguridad), el voto popular habrá sido sólo una tregua que pronto puede transformarse en desaprobación.











