El Hogar de Noche, dependiente de la Secretaría de Desarrollo Social de la Municipalidad de Salta, amplió su capacidad de alojamiento para hacer frente a las bajas temperaturas. Como novedad, el refugio ahora también recibe a las mascotas de las personas en situación de calle, reconociendo el importante vínculo emocional que existe entre ellas. Esta iniciativa busca brindar un espacio seguro y cálido tanto para las personas como para sus animales de compañía.
Juan Pablo Linares, subsecretario de Inclusión Social, destacó que el Hogar de Noche cuenta con cuchas para los perros que acompañan a las personas que se refugian allí. Son alrededor de cinco perros callejeros que son recibidos para protegerlos del frío. La inclusión de las mascotas responde a la comprensión de que estos animales son parte del vínculo emocional y familiar de muchas personas en situación de vulnerabilidad.
Además, se ha sumado personal de Bienestar Animal al equipo que realiza recorridos nocturnos por la ciudad para brindar asistencia a quienes duermen a la intemperie. Este equipo se encarga de vacunar a los animales que se encuentran en la calle y a los que llegan al refugio nocturno, garantizando su salud y bienestar.
Para atender la creciente demanda, se han sumado más cuchetas al Hogar de Noche, lo que permite alojar a un mayor número de personas. Cada cama está señalizada y se asigna de acuerdo a las necesidades de cada persona. Se tiene en cuenta si alguien necesita tener el baño más cerca, adaptando el espacio a sus requerimientos.
Este espacio ofrece atención integral a quienes se alojan allí. Se les provee de jabón, shampoo, toallas y otros elementos de higiene personal. Los usuarios solo ingresan con un cepillo y pasta dental, mientras que el resto de sus pertenencias se guardan en un lugar seguro. El refugio cuenta con sectores diferenciados para varones, lavadero, patios para socializar y sectores adaptados para diferentes necesidades.
El perfil de quienes asisten al Hogar de Noche es muy diverso, incluyendo adultos mayores, jóvenes, personas de edad media e incluso extranjeros que se encuentran varados en la ciudad. El refugio también colabora con la revinculación de personas que han perdido su empleo o no pueden continuar su viaje, brindándoles apoyo para encontrar trabajo y salir adelante. Actualmente, el promedio diario de personas que se alojan en este lugar es de aproximadamente 50, gracias al trabajo constante de un equipo comprometido con brindar abrigo y compañía a quienes más lo necesitan.