La Justicia ordenó este miércoles la detención de Ariel García Furfaro, titular de HLB Pharma y Laboratorios Ramallo, acusado de estar detrás de la producción y distribución de fentanilo contaminado. El procedimiento, realizado por la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) y Gendarmería Nacional, culminó con su traslado a la cárcel de Ezeiza.
Por la causa por el fentanilo contaminado, junto a él fueron arrestados: Diego y Damián García, hermanos del empresario, responsables del control de las actividades de los laboratorios y Nilda Furfaro, madre de Ariel y vicepresidenta de HLB.
La investigación también alcanzó a otros integrantes de la cúpula empresarial: Javier Tchukran, director general de HLB y Ramallo, Carolina Ansaldi, Víctor Boccaccio y José Antonio Maiorano, directores técnicos de ambas firmas, Horacio Tallarico, presidente de Laboratorios Ramallo y Rodolfo Labrusciano, director suplente de la misma empresa.
Patricia Bullrich: “Se acabó la impunidad”
Tras los operativos por la causa del fentanilo contaminado, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, celebró los arrestos en su cuenta de X: “Los responsables del lote letal de fentanilo, tras las rejas. Se acabó la impunidad: ahora deberán responder ante la Justicia, frente a las familias y a toda la sociedad”.
Minutos después, difundió una fotografía de Ariel García Furfaro detenido, con un mensaje contundente: “Este es el dueño del laboratorio del fentanilo contaminado. El último que faltaba, detenido. Ser amigo del poder kirchnerista no te salva”.
Investigación judicial: 96 muertes bajo la lupa
La causa, a cargo del juez Ernesto Kreplak y la fiscal María Laura Roteta, apunta a los lotes 31.202 y 31.244 de fentanilo, contaminados con bacterias Klebsiella y Ralstonia.
El dictamen fiscal sostiene que hubo “graves falencias estructurales en los procesos de producción” y que los medicamentos salieron al mercado en condiciones que expusieron a miles de pacientes a un riesgo sanitario concreto.
Según los informes del Cuerpo Médico Forense, al menos 12 de los 20 primeros casos analizados mostraron un agravamiento fatal luego de recibir el fármaco contaminado. Los peritos confirmaron la presencia del fentanilo de HLB Pharma en la sangre de los pacientes fallecidos.
Un caso de criminalidad compleja
La fiscal Roteta definió el expediente como un “caso de criminalidad compleja” que involucra a un conglomerado empresarial organizado y un número elevado de víctimas.
El caso se originó tras la detección de muertes vinculadas al uso hospitalario de fentanilo contaminado. Los pacientes presentaban cuadros complejos previos, pero los peritajes determinaron que la droga actuó como “factor agravante significativo”, contribuyendo al desenlace fatal.
El Ministerio Público Fiscal continúa evaluando si existió desvío de productos al mercado ilegal, además de las irregularidades en los controles de calidad de los laboratorios.